Cuando un cliente se reúne conmigo durante las primeras citas, en su mayoría traen como referencia imágenes de inspiración de cómo les gustaría cada espacio de su casa. Cuando indago a profundidad sobre cada una, por lo general es un elemento específico que les llama la atención, la paleta de colores o el feeling que ven a través de la imagen.

Eso es suficiente para comenzar a desarrollar tu espacio, pero siempre teniendo claro, que es lo que realmente te llamó la atención de esa referencia.

A continuación, te pongo un ejemplo que te puede ayudar

En este baño de visitas, la idea era que se sintiera orgánico y fresco, llamaba la atención el verde y la madera natural. Siendo el cliente un poco más extravagante que rústico, le propusimos un mueble de madera con carácter y textura de relieve, para la pared pensamos en un papel decorativo verde con siluetas en hojas que nos aporta el toque orgánico, le fuimos colocando elementos decorativos y detalles que llevaran a que el espacio se sintiera más sofisticado. Alineado al estilo de este cliente.

Es importante que siempre identifiques en las imágenes que guardas como referencia, que es lo que te llamó la atención de ese espacio.  Así te aseguras de que el tuyo sea una escenografía de tu esencia y no la réplica de una foto de inspiración.